Estos pastelitos se los dedico a todos los visitantes argentinos de mi blog, que hay bastantes y muchos de ellos por lo que se ve aficionados a los bombones caseros. Están hechos según la receta de idéntico nombre al título de esta entrada del blog, y que encontré en el envoltorio del típico dulce argentino Mantecol.
Yo, por cierto, nunca había probado el Mantecol. Si tomadas tal cual estas barritas de cacahuete ya están ricas, en cuanto a la receta su resultado es excelente, es un pastel que parece salido de la más refinada pastelería. Sin embargo, yo no lo he hecho en una sola pieza, sino en porciones de ración, pero sea como sea esto está riquísimo.
Yo, por cierto, nunca había probado el Mantecol. Si tomadas tal cual estas barritas de cacahuete ya están ricas, en cuanto a la receta su resultado es excelente, es un pastel que parece salido de la más refinada pastelería. Sin embargo, yo no lo he hecho en una sola pieza, sino en porciones de ración, pero sea como sea esto está riquísimo.
Con las cantidades de la receta os saldrán más porciones que en las imágenes, ya que yo reduje los ingredientes en cantidad pues no quería hacer tanto.
Por cierto, este es el Mantecol:
Y esta la harina leudante Blancaflor, también muy usada en Argentina:
La receta:
INGREDIENTES:
3 huevos medianos
1 taza de azúcar
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 cucharada colmada de almendra en trocitos
1 copita de coñac
1/2 taza de aceite de girasol
1 barrita de Mantecol
3/4 de taza de harina leudante ("bizcochona") previamente tamizada
Azúcar impalpable (azúcar glas)
Agua
ELABORACIÓN
En un bol mediano-grande batimos los huevos, el azúcar, la vainilla, las almendras y el licor. Agregamos a continuación el aceite y seguimos batiendo hasta integrar bien. Pesar 80g de Mantecol, desmenuzarlo con los dedos y unirlo a la preparación con movimientos envolventes, sin batir. Añadir suavemente la harina (no olvidar tamizarla). Engrasar y enharinar el molde elegido y verter la masa.
Para hornear el dulce he utilizado mi horno de aire a turboconvección, el de cristal, pero puede hacerse en horno convencional. La receta dice que se cocine al horno mínimo 30 minutos; yo lo he horneado 35 minutos a 160 grados y ha quedado un poco, sólo un poco crudo por la parte de abajo, que es como me gusta a mí...no me gustan nada los bizcochos excesivamente secos.
Mientras la torta se hornea podemos ir preparando el glaseado, o glaceado.
Hervimos un poco de agua (usaremos poca cantidad) y en ella disolvemos el azúcar glas, yo no lo he medido, es cuestión de obtener una mezcla semilíquida en cantidad para adornar a nuestro gusto la torta. A esta mezcla le agregamos el Mantecol que nos había sobrado, troceadito, mezclamos bien y ya tenemos nuestra glasa. Sólo nos queda bañar el bizcocho (si son tortas individuales como las mías es muy fácil desmoldarlas en tibio) y ya lo podemos servir. Está igualmente rico entibiado o al día siguiente, después de una noche en el frigorífico...o la heladera, como se dice en Argentina.
2 comentarios:
Noe hija y de donde sacas esos ingredientes? Será que yo vivo en el culo del mundo pero aquí no hay de eso y bien que me gustaría , no creas que soy muy de caprichos.
Besos desde Mérida
Jajaja, fedri, me has hecho reír...Hija es que Mallorca y sobre todo Palma es un melting-pot de nacionalidades...y muchos inmigrantes han montado sus propias tiendas. Ni te cuento: un sueño: productos de la India, de los países árabes, sudamericanos, orientales... Con lo que me gusta a mí entrar ahí...Cuántas veces me he venido a casa con una cosa que no sabía lo que era (si la tienda no es latina, tendrás suerte si te entienden) y lo he tenido que poner en Google...Besitos!
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